Un asistente del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, habría revelado información confidencial a medios de comunicación internacionales con el objetivo de moldear la percepción pública respecto a las negociaciones sobre rehenes, según un comunicado emitido por el tribunal de magistrados de Rishon Lezion, Israel.
Eliezer Feldstein fue detenido a inicios de este mes por la supuesta divulgación de «información de inteligencia clasificada y delicada», de acuerdo con los documentos judiciales. El comunicado del tribunal del domingo proporciona más detalles sobre esta presunta filtración.
De acuerdo con el tribunal, la filtración se inició cuando un suboficial de las reservas de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) sustrajo un «documento altamente sensible y clasificado».
En abril de este año, el suboficial remitió una copia del documento a Feldstein, quien posteriormente lo hizo llegar a los medios de comunicación israelíes en septiembre, con la intención de afectar la opinión pública respecto a las negociaciones en curso sobre los rehenes, de acuerdo con el comunicado emitido por el tribunal.
Este suceso tuvo lugar poco después de que las Fuerzas de Defensa de Israel informaran el 1 de septiembre sobre el asesinato de seis rehenes israelíes en Gaza. De estos, cuatro estaban programados para ser liberados en la primera fase de un posible acuerdo.
Según el comunicado del tribunal, los medios de comunicación israelíes se vieron restringidos en su capacidad para publicar artículos vinculados al documento que había sido filtrado por las autoridades de censura del país. Ante esta situación, Feldstein optó por eludir la censura y decidió difundir el documento a través de medios internacionales.
En septiembre, se publicaron dos artículos, uno en el Jewish Chronicle del Reino Unido y otro en el Bild de Alemania, que contenían información relacionada con las filtraciones. Ambos artículos citaban fuentes de inteligencia israelíes y respaldaban una narrativa que había sido promovida por Netanyahu en ese momento.
Yair Lapid, líder de la oposición en Israel, junto a Benny Gantz, quien dejó el gabinete de guerra de Netanyahu a comienzos de este año, han utilizado las supuestas filtraciones como un indicativo del fracaso del gobierno. Gantz describió esta situación como un “crimen nacional”, subrayando la gravedad del asunto.
Ambos políticos han responsabilizado a la oficina de Netanyahu por estas filtraciones, y Gantz ha señalado que el primer ministro está utilizando esta información para obtener ventajas políticas en su favor. Esta acusación resalta la tensión existente entre el gobierno y la oposición en el contexto actual.
Un portavoz de Netanyahu desmintió, a principios de este mes, que hubiera habido filtraciones provenientes de la Oficina del Primer Ministro, afirmando que la “persona en cuestión nunca participó en discusiones relacionadas con la seguridad”, en una clara referencia a Feldstein. Esta negación busca desestimar las acusaciones y reafirmar la integridad del gobierno.