Los contratos de los futbolistas profesionales son conocidos por sus cifras astronómicas y sus millonarias cláusulas de rescisión. Sin embargo, detrás de la seriedad de los despachos, se esconden acuerdos tan extraños y extravagantes que parecen sacados de una película. Desde permisos para salir de fiesta hasta prohibiciones de viajar al espacio, estas cláusulas revelan el poder de negociación de los jugadores y la creatividad (o desesperación) de los clubes. A su vez dichas cláusulas están jurídicamente orientadas a enaltecer uno de los principios más importantes dentro de la concepción de contrato propiamente dicho, tal es el caso del principio de la autonomía de la voluntad, algunas de las cláusulas más importantes del deporte rey en el mundo son las siguientes.
1. Ronaldinho: Permiso para ir de fiesta
Cuando el genio brasileño Ronaldinho regresó a Brasil para jugar con el Flamengo, una de las condiciones más insólitas que puso sobre la mesa fue un permiso contractual. El acuerdo estipulaba que el jugador tenía permitido salir de fiesta al menos dos veces por semana en Río de Janeiro, sin que el club pudiera sancionarlo. Aunque el club esperaba que esta cláusula limitara sus salidas, los informes sugirieron que el futbolista salía de fiesta casi todos los días, demostrando que su magia iba más allá de la cancha.
2. Stefan Schwarz: Prohibido viajar al espacio
En 1999, el sueco Stefan Schwarz fue traspasado al Sunderland. Durante las negociaciones, el club se enteró de que uno de sus agentes tenía un cupo en el primer vuelo comercial al espacio. Temiendo que el jugador quisiera acompañarlo en tan particular travesía, el equipo inglés decidió incluir una cláusula que le prohibía expresamente a Schwarz «abandonar la atmósfera terrestre». Aunque el viaje nunca se concretó, la cláusula pasó a la historia como una de las más descabelladas.
3. Giuseppe Reina: La casa de LEGO
El delantero alemán Giuseppe Reina firmó un contrato con el Arminia Bielefeld en 1996 en el que estipulaba que recibiría una casa por cada temporada que cumpliera. Sin embargo, no especificó de qué tipo o tamaño debía ser. Aprovechando el vacío legal, el club cumplió su parte del trato de la forma más creativa posible: le entregó una casa hecha de piezas de LEGO por cada año, dejando en claro que hasta los contratos más simples deben ser detallados.
4. Rafael van der Vaart: La prohibición del color rojo
Durante su etapa en el Real Betis, el centrocampista holandés Rafael van der Vaart se encontró con una cláusula muy particular en su contrato: se le prohibía usar botas de fútbol de color rojo. El motivo era simple: el rojo es el color del Sevilla, el rival histórico del equipo bético. El jugador tuvo que renunciar a sus botas preferidas para cumplir con la condición impuesta por el club.
5. Luis Suárez: La cláusula «anti-mordiscos»
Tras su fichaje por el Barcelona, el contrato del delantero uruguayo Luis Suárez incluyó una cláusula inusual para un deportista de élite: en caso de morder a un rival nuevamente (algo que ya había hecho en dos ocasiones anteriores), el jugador tendría que pagar una indemnización al club. Aunque no existen registros de que esta cláusula se haya activado, su existencia es un claro ejemplo de las precauciones que los clubes deben tomar con sus jugadores.
 de los clubes. A su vez dichas cláusulas están jurídicamente orientadas a enaltecer uno de los principios más importantes dentro de la concepción de contrato propiamente dicho, tal es el caso del principio de la autonomía de la voluntad, algunas de las cláusulas más importantes del deporte rey en el mundo son las siguientes.){kind=link}